
Después de tanto tiempo echando de menos una buena tapa de pescaíto frito, hoy hemos decidido hacer lo posible por comerla.
Ahí va nuestra más reciente y fresca receta: ajo, perejil, aceite de oliva, un poco de harina, un montón de intentos fallidos tirando la atarraya, paciencia, mucha paciencia, una isla paradisíaca en las Islas San Blas rodeada de pescadito y algo de nostalgia del sabor de nuestra infancia… y con un poco de suerte, finalmente, pescadito. ¡Buen provecho!